La importancia del acabado en las etiquetas
Siempre hablamos de lo importante que es dar una buena imagen de nuestro producto, ¿pero cómo podemos conseguirlo? Hay muchas formas de lograrlo, pero en esta publicación nos centraremos en lo que transmitimos y cómo lo hacemos con las etiquetas de los productos.
Una buena impresión puede tener muchos motivos, y es algo muy subjetivo y no aplicable a todas la personas por igual. Sin embargo, hay ciertos detalles que suelen ser universales como por ejemplo el golpe seco, un acabado capaz de generar en el consumidor una percepción diferente en la vista y en el tacto. Se trata de un pequeño toque que se aplica sobre alguno de los elementos de la etiquetas para resaltarlo, y se puede poner sobre el nombre de marca o sobre un elemento gráfico del diseño de la etiqueta. Al tacto se nota el relieve y provoca una impresión más profesional (y quizás premium) que una etiqueta de toda la vida.
La forma o troquel de la etiqueta. Una etiqueta de toda la vida será cuadrada, rectangular o circular, pero no debemos limitarnos a esas formas simples. El mundo de los troqueles es infinito, y cualquier forma que se te ocurra tiene cabida. Destacarás respecto a las demás etiquetas por usar un diseño innovador o apropiado a tu producto, pero cuidado, tampoco te excedas y hagas formas sin ton ni son o inadecuadas; un poco de sentido común siempre viene bien, más teniendo en cuenta que posteriormente deberás imprimir en esa forma recortada.
El stamping también es una opción muy adecuada para dar un resultado más vistoso a nuestras etiquetas. Normalmente se suele utilizar para destacar el logo de la empresa, los títulos o detalles que quieres que se vean de un primer vistazo. Como con todo, no debemos excedernos y hacer todos los textos o imágenes en stamping, ya que lograrás el efecto contrario al que quieres conseguir, es decir, que el usuario no sepa a dónde mirar y acabe pasando del producto.
El origen de la imprenta
Hemos hablado de muchos temas distintos durante estos meses: la Inteligencia Artificial, las tipografías, el estamping, los colores… pero nos hemos olvidado de lo más importante, y es hablar de la imprenta, su origen y cómo esa revolución supuso un cambio en nuestras vidas (para bien, obviamente). En el post de hoy haremos un breve repaso y espero que aprendamos algo juntos.
Antes de la aparición de la imprenta los libros se difundían exclusivamente a través de copias manuscritas, hechas por copistas, muchos de los cuales eran monjes o frailes, por encargo del clero o de reyes y nobles. Las ilustraciones y las letras mayúsculas eran productos decorativos y artísticos que generalmente realizaban artesanos diferentes del copista. Por ello la producción de un libro manuscrito era un proceso que podía durar años, ya que cada uno debía pasar por las manos de copistas, ilustradores y encuadernadores. Y todo ello, para producir un único ejemplar.
Entre 1436 y 1450 se sabe con seguridad que Gutenberg construyó un aparato que permitía fundir las letras metálicas satisfactoriamente. Y sería en 1455 cuando inauguraría la industria editorial con «La Biblia de Gutenberg».
La expansión del invento llegó a Italia y a Roma y sería en 1464 cuando en Francia emplearon la técnica y posteriormente en Oxford en 1479. La imprenta en España llegó entre 1465-1470 desde Italia, pero los primeros impresores fueron alemanes. Italia fue el país que se situó por delante de Alemania en este tipo de actividad, siendo las principales ciudades de producción Florencia, Milán y Venecia. Países como Francia e Inglaterra dependían de las ediciones italianas.
En Bruselas hubo también actividad en la impresión, pero principalmente para abastecer a la ciudad de Amberes y a sus clientes: comerciantes y burgueses que acabaron imprimiendo para exportar obras de origen británico. En los siglos XV y XVI, era tan elevada la actividad en el sector de la impresión que los impresores debieron de utilizar papeles de distintos lugares de origen dado que la industria no podía abastecer toda la demanda que había en aquellos momentos.
Gracias a la revolución industrial y a los adelantos técnicos nacieron las imprentas nacionales. La máquina de reacción, en la que el papel, impreso por una cara, retrocedía y era impreso por la otra; Surgió en 1854. Un año después se harían tiradas de 10.000 ejemplares a la hora en la máquina rotativa de Hue gracias a la utilización del papel continuo y del molde cilíndrico que permitía la impresión por las dos caras. La impresión de los periódicos se realizaría a partir de entonces en máquinas con composición en Linotipía y la de las revistas y libros se realizaría en Monotipia.
La Inteligencia Artificial en el trabajo
La semana pasada hablamos de la Inteligencia Artificial aplicada al diseño gráfico, y esta semana vamos a seguir ampliando el tema para entender un poco mejor cómo pueden sernos útiles en nuestro trabajo y también si es posible que nos reemplacen en un futuro próximo.
Si pensamos en el «futuro», visto desde la perspectiva de las películas o series de los 2000 y anteriores, nos vienen a la mente esas imágenes rocambolescas de robots y coches voladores, donde nadie trabaja realmente en tareas clásicas y todo está automatizado y perfectamente coordinado. Si bien en el presente hay muchas tareas que sí se han automatizado y la presencia humana no es tan necesaria, aún estamos muy lejos de ese idílico futuro. Sin embargo, la irrupción de las Inteligencias Artificiales en los últimos años ha supuesto una verdadera revolución en cuanto a nuestro día a día. IAs para recrear voces, imágenes, vídeos, textos… pero eso es solo la punta del iceberg. A nivel industrial hay muchas formas en las que esas IAs ya trabajan con nosotros, como por ejemplo detectando una temperatura inadecuada y parando la máquina o enfriándola, notificando si un envío va a sufrir alguna complicación o retraso debido a las condiciones del trayecto… los casos son innumerables, y podríamos estar todo el día hablando de ello.
Según la empresa especializada en tecnología Gartner, para finales de esta década, el 85% de las interacciones que se realicen con los clientes no requerirán representantes humanos. Las predicciones de la firma nos dicen que el análisis automatizado de los canales de medios sociales, software de CRM y chatbots personalizados que reconocen caras y voces reducirá en gran medida la necesidad de los centros de llamadas tradicionales. Si bien las máquinas realizan tareas complejas, hay algo propio de la humanidad que todavía no pueden emular. Ello tiene que ver con las habilidades socioemocionales que se necesitan cuando se trabaja con otras personas. De igual forma, el desarrollo continuo de habilidades digitales y creativas indispensables para adaptarse a los cambios continuos de las tecnologías.
La inteligencia artificial aplicada al diseño
La gran revolución de este último año ha sido la Inteligencia Artificial. Hemos visto cómo han surgido IAs de todo tipo, tanto de texto, sonido, imágenes y vídeos. Algo que hace un tiempo sería completamente impensable, hoy en día va tomando forma y cada vez está más avanzado, hasta el punto que algunas personas se cuestionan si su puesto de trabajo está en peligro por la irrupción de estas herramientas. A día de hoy podemos decir que no, y es más, deberíamos empezar a utilizarlas para hacernos la vida más sencilla en nuestro día a día.
En el post de hoy hablaremos de algunas formas de ayudarnos a que nuestros diseños tengan un mayor impacto, ahorrar tiempo y lograr un resultado espectacular, siempre ayudados por la Inteligencia Artificial pero sin depender completamente de ella, sino usándola como complemento.
Actualmente, la tecnología de IA mejora el rendimiento y la productividad de la empresa automatizando procesos que antes precisaban esfuerzo humano. La IA también puede dar sentido a los datos a una escala que ningún humano jamás podría. Esta capacidad puede generar importantes ventajas para la empresa.
La mayoría de las empresas ha hecho que la ciencia de datos sea una prioridad, por lo que están realizando grandes inversiones económicas en ella. Gartner realizó una encuesta a más de 3.000 directores de tecnologías y sistemas. Los encuestados clasificaron la analítica y la inteligencia empresarial como las tecnologías más importantes para sus organizaciones. Es decir, consideraron que estas tecnologías son las más estratégicas para sus empresas y, además, son las que están atrayendo nuevas inversiones.
La Inteligencia Artificial en el Diseño. Es importante tener en cuenta que la inteligencia artificial no puede reemplazar la creatividad y el juicio humano en el diseño gráfico. Los diseñadores gráficos siguen siendo responsables de la definición de la estética y la dirección creativa de un proyecto. Su experiencia y conocimiento es y continuará siendo imprescindible. Algunos ejemplos en los que podemos aplicarla son:
Generación automática de diseños. Con la IA, es posible crear diseños en base a ciertos criterios y preferencias del usuario, sin la necesidad de intervención humana.
Análisis de tendencias y preferencias. La inteligencia artificial puede analizar grandes cantidades de datos para identificar tendencias y preferencias en el diseño gráfico en términos de colores, tipografías, imágenes, etc.
Mejora de la eficiencia en el proceso de diseño. Puede automatizar tareas repetitivas, como el redimensionamiento de imágenes o la creación de borradores de diseño. Esto ayuda a los diseñadores a centrarse en el desarrollo creativo.
Creación de experiencias interactivas. La IA puede utilizarse para crear experiencias interactivas en tiempo real, como animaciones y efectos visuales que respondan a la acción del usuario.
Formas de publicitar nuestra empresa sin recurrir a redes sociales
Hoy en día las redes sociales son una herramienta potentísima para publicitar nuestro negocio. La inmediatez de las redes nos ofrece una ventaja importante respecto a la publicidad convencional, así como el «reach» y la capacidad de llegar a todo el planeta sin desplazarnos de nuestro ordenador o móvil. Sin embargo, no podemos olvidarnos de las maneras más tradicionales de dar a conocer nuestro negocio, pues tienen tanta importancia o más que las digitales. En este post haremos un breve repaso a esas formas de comunicación.
Los carteles, letras corpóreas o vinilos a la entrada de nuestro negocio. ¿Qué mejor forma de darnos a conocer a todos los viandantes que ofrecer una breve imagen de lo que hacemos (ya sea con logo, claim, o ambos) Además no tenemos por qué limitarnos simplemente a un trozo de PVC o metal clásico, podemos utilizar luces led para destacarlo en la oscuridad y llamar aún más la atención.
La publicidad o anuncios en prensa impresa. Aunque haya quedado algo desfasada, sigue siendo un factor con cierta importancia a la hora de darnos a conocer. Sin embargo, debemos tener en cuenta que su target es bastante específico (por lo general adultos) y su reach muy limitado.
Esta forma de publicitarnos se ha visto reemplazada por los anuncios en prensa digital, más eficaces y con un reach mucho mayor.
El boca a boca. Sí, algo tan arcaico como hacer las cosas bien y que los clientes nos recomienden a otras personas. ¿Verdad que ni se te había ocurrido pensar en ello? Al fin y al cabo, si eres bueno en lo que haces lograrás crearte una red clientelar importante tarde o temprano, pero para ello hay que ser constante, tratar con educación a tus clientes y, sobre todo, ser constante y perseverante.
Tendencias en el diseño gráfico para el año 2023
¿Quieres saber cuáles son las tendencias para este año 2023 en el ámbito del diseño gráfico? En este post haremos un breve repaso de algunos estilos y colores con los que seguro que llamaremos la atención y lo «petaremos».
No es sorpresa para nadie que todos los años la empresa Pantone lanza su color para el próximo año venidero. En este año 2023 el color es el Viva Magenta, un color llamativo y vivo, que sin duda alguna llama al optimismo y la alegría.
Pero no terminamos aquí con los colores, pues según una encuesta realizada por WSGN (Worth Global Style Network) estos son los colores más votados para los sectores de la moda, tecnología, interiorismo…
En cuanto a tipografías, vemos un auge de las fuentes experimentales y rocambolescas. La principal característica del uso de las tipografías experimentales es que son diferentes y llamativas. También aportan movimiento y dinamismo a la composición a través de sus formas irregulares, lo cual las hace más divertidas. Este estilo tipográfico va muy de la mano con la creatividad y la sensación que queremos transmitir mediante la propuesta gráfica.
En la antítesis encontramos el Retro Flat. Su principal característica es que se crea a partir de formas e ilustraciones hechas con formas planas y el uso de colores llamativos que contrasten entre sí. Además, suele estar acompañado por tipografías redondeadas y con bordes gruesos y oscuros.
Pero sin duda alguna, este año 2023 se caracteriza por los diseños generados por Inteligencias Artificiales. Si combinamos esas imágenes (retocadas y mejoradas) con diseños propios, lograremos unos resultados espectaculares que, de otra forma, nos habría llevado mucho tiempo realizar.
Y vosotros, ¿qué opináis de estas tendencias? ¿Incluiríais o quitaríais alguna? Os leemos.
¿Qué transmite nuestra tipografía y qué tipos hay?
Hasta ahora hemos hablado de los colores, los degradados, el tipo de papel y los tipos de impresiones. Sin embargo, nos hemos «olvidado» de un aspecto importantísimo de los diseños, logotipos, textos… Sí, nos referimos a la tipografía.
Está claro que un tipo de fuente más elegante no transmite lo mismo que un tipo de fuente más informal, pero ¿cómo podemos distinguir ambos tipos y qué características tienen?
Empecemos con las tipografías con serifa. Las tipografías con serifa son aquellas que cuentan con remates o terminales, que son esos pequeños adornos ubicados en los extremos de los trazos de los caracteres. Esta se caracterizan por dar un aspecto clásico y formal, en ocasiones elegante y es posible que algo anticuado o serio. Son tipografías idóneas para párrafos o textos largos, ya que los pequeños terminales o serifas contribuyen a que se cree una línea imaginaria bajo el texto que facilita mucho lectura a nuestro ojo.
Las tipografías sin serifa o de palo seco, por el contrario, son las más utilizadas en el día a día y se pueden emplear para prácticamente cualquier diseño o texto que se nos ocurra. En este sentido, podemos decir que son tipografías todoterreno. Se caracterizan por la ausencia de remates y terminales. Se diseñan sin serifas y suelen asociarse con la tipografía comercial, ya que ofrecen un resultado muy bueno para la impresión de titulares o poco texto, en carteles y publicidad. Este estilo de fuente evoca modernidad, seguridad, neutralidad y minimalismo.
Aunque este tipo de fuente tipográfica no cuente con la línea invisible que consiguen las tipografías Serif para los textos largos, es muy recurrida también para textos en pantalla y textos en tamaños pequeños. Gracias precisamente a la ausencia de terminales y remates, esta tipografía puede resultar más legible en textos de pequeño tamaño que su hermana mayor.
Las tipografías manuscritas o cursivas imitan a la escritura del ser humano. Generalmente este tipo de tipografías cuentan con una tendencia itálica o cursiva claro. Las letras se ligan entre sí y encontramos curvas más pronunciadas que en las tipografías con serifa o de palo seco. Se emplean sobre todo en logotipos que tengan que ver con algo artesanal, casero o hecho a mano, ya que nos transmite cercanía y profesionalidad.
Por último tenemos las tipografías display o decorativas. Son menos formales, más alocadas y dispares, por lo que podemos utilizarlas para una variedad muy amplia de situaciones. En muchas ocasiones no se crea una familia tipográfica completa (todas las letras) sino que se realizan únicamente las letras a emplear, ya que estas tipografías no son adecuadas para textos y no tendría sentido invertir tiempo y esfuerzo en algo que no se va a utilizar.
CMYK, RGB, Pantones… ¿qué son?
CMYK, RGB, Pantone… ¿qué son todas estas palabras y por qué son tan importantes en nuestras impresiones?
Para empezar, definiremos rápidamente qué significan y posteriormente por qué se utilizan.
CMYK se refiere a las iniciales de las palabras Cyan, Magenta, Yellow (amarillo) y Key (negro). Son los colores estándar utilizados en las impresiones, tanto offset y digitales. Se considera, además, un modelo sustractivo porque la mezcla de los tres primeros sobre un fondo blanco (cian, amarillo y magenta) da como resultado el cuarto de los principales, el negro. El CMYK sirve para el trabajo a nivel de imprenta. Las compañías y agencias de marketing, sobre todo los diseñadores de estas, deben acostumbrarse a este modelo de color, ya que es el que suelen utilizar las imprentas a la hora de dar color a los rótulos. Por lo tanto, este sistema se plantea como la mejor forma de indicar a estas empresas cómo ha de imprimirse cualquier cartel, sea publicitario o con otros fines.
Por el contrario, RGB son los colores Red, Green y Blue empleados en las pantallas digitales digitales de nuestros móviles, ordenadores… El modo de color RGB está basado en la suma de los colores lumínicos primarios. A esto se le conoce como síntesis aditiva, donde los colores deben sumarse para conseguir uno nuevo. El color se consigue por espectros de luz y no tinta. Los colores se forman mediante la suma de diferentes luces en sus diferentes longitudes de onda. El color blanco se consigue mediante la suma de los tres colores a partes iguales con la máxima saturación posible. Por otro lado, la ausencia de colores primarios nos origina el color negro.
El color Pantone es algo distinto a los anteriores. Pantone es una empresa norteamericana que creó el sistema PMS (Pantone Matching System) que consiste en la identificación de los colores por medio de un código compuesto por números y letras. La empresa ha creado sus paleta de colores para facilitar la identificación de los colores. Están formadas por todos los colores creados hasta la fecha incluyendo su código pantone y la equivalencia a los valores CMYK, HTML y RGB para diseño digital. No existe ninguna guía que contenga todos los colores. Existen seis tipos de cartas de colores Pantone según del tipo de papel donde se imprima o el acabado de la tinta, ya que dependiendo del tipo de soporte que utilices el color se visualiza de manera distinta.
La utilización de un color Pantone nos puede ahorrar mucho trabajo, ya que en vez de mezclar las tintas CMYK para obtener un resultado, por ejemplo un rojo, podemos elegir un Pantone rojo y ahorrarnos usar cuatro tintas distintas.
¿Conocías todos estos detalles? Sin duda es algo a tener muy en cuenta a la hora de imprimir nuestros trabajos, ya que la utilización de unas tintas u otras supone un incremento o disminución de los precios y tiempos.