El diseño de la bandera LGBT
¿Quién diseñó la bandera LGBT?
Corría el año 1978 cuando Gilbert Baker, artista plástico especializado en banderas, diseñó el que hoy es todo un símbolo del movimiento LGBT y que ondea el día del Orgullo Gay.
La bandera LGBT –con su arcoíris original– no puede negar su aire hippy. Está compuesta por 8 franjas horizontales de diversos colores, cada uno con su significado: el magenta, la sexualidad; el rojo, la vida; el anaranjado, la sanación; el amarillo, la luz del sol; el verde, la tranquilidad con la naturaleza; el turquesa, la magia y el arte; el índigo, la armonía; el violeta, la espiritualidad.
MODIFICACIONES DEL DISEÑO ORIGINAL
En 1979, año de la primera aparición masiva de la bandera arcoíris, el rosa subido -magenta- no se producía industrialmente y la solución fue eliminar la primera franja. Paradójicamente, la Bandera Arcoíris que hoy es el emblema gay más extendido en el mundo es una bandera castrada, ya que omite el color que significaba la sexualidad. Más tarde se decidió eliminar las franjas turquesa e índigo. Por extraño que parezca, el motivo en este caso fue que los organizadores de la marcha necesitaban que la bandera contuviera un número par de franjas para poner la mitad de un lado de la calle y la otra mitad del otro. Estas dos se sustituyeron por una franja de azul holandés. Y llegamos a la versión más conocida en la actualidad.
Baker nunca registró el copyright de su bandera arcoíris. Renunció a sus derechos autorales para donar al mundo un emblema «digno y bello». En estos momentos, como ya no está vigente ninguno de los obstáculos que impedían producir masivamente el diseño original, Gilbert Baker ha hecho una llamada a volver a la Bandera Arcoíris original de 8 franjas y 8 colores.
Esta bandera no se diseñó sólo como un símbolo de diversidad, sino como el símbolo de la lucha cotidiana por una vida integral digna. No es una bandera exclusivista, para marcar diferencias con cualquier otro sector -uso que desgraciadamente es común para las banderas nacionales-, sino que es un símbolo de la lucha de toda la humanidad por conseguir una vida plenamente digna y humana para todos. Una frase exacta para expresar esta voluntad incluyente implícita en la bandera LGBT arcoíris es: los derechos humanos son de todos.
DISEÑO PARA LA COMUNIDAD GAY
Las marcas no son ajenas al universo económico que mueve el entorno LGBT. El 45% de este segmento son profesionales o empresarios, gastan más en turismo, artículos de lujo y, lo más importante, suelen ser muy leales a las marcas que utilizan, particularmente aquellas que se promocionan como gay-friendly. Ante esta coyuntura, marcas como Dolce & Gabanna, Absolut y más recientemente J&B, no han dudado en hacer guiños y practicar un re-styling en sus productos para acercarse al perfil de este consumidor.